Anoche me tomé 26 alplax, que lo parió, con la elección a gobernador en Chubut que no sé donde queda, ni sé quién era el candidato del Das Neves, pero por un pelito finito como pa peine e piojo le ganamo a la Reina le ganamo. " Das Neves Campión. Sos grande como Perón. ". Ahora los poquitos no reinistas que quedamo tenemo changüí otra vez. Somos anti monárquicos, pocos, pero anti monárquicos. Como los del 9 de julio. Que no nos salga un San Martín ahora.
Ah !!! Fueron pal festejo el Felipe Solá, el Marcelo López Arias que está como bola sin manija desde que su conductor el Romero de Salta, (ese negrino fino que se cree inglés pero es chino) los largó a la intemperie, fue también la Graciela Camaño, que sí se recibió ahora de abogada y todo y no le va a pegar más trompadas inmortales al Kunkel, y tuti cuanti querían subir al palco, como siempre. Un rato antes toditos le rajaban a la cámara.
Pero el importante que estuvo fue el COLORADO DE NARVAEZ, que importa mucho porque es un galán que tiene billetera, y hasta canal de tele, no importa que sea colombiano.
¡ Ah...! Vuelve el alma al cuerpo de la pepona. Ahora, a rezar para que el Cabezón Duhalde no se ponga celoso. Porque cuando más bajo caemos más nos la creemos. Pero los afiches del Cabezón en Buenos Aires increíblemente están lindos. Le pagó bien a un fotógrafo artista para que haga la magia de sacarlo lindo, desde abajo, como para disimular la cabezota. Pero el que no gastó un mango en la foto fue el Pelado, que desperdició la pinta y hasta el apellido medio franchute "Buryaille", que da un no se qué de distinción. Bueno, las fotos del Gildo parece que se las hubiera tomado el gallego Joga, están h o r r i b l e s. Así no se empieza un quinto mandato. Bueno, no importa, votos le sobran. Pero la gente tiene que ir a votar más contenta, con la estampita de un Gildo lindo. Le hubieran hecho una foto con los ojos celestes solos, en primer plano. Y esos enormes ojitos celestes con un fondo de las obras públicas, la costanera, el estadio, las
ruta, escuelas, escuelitas, el Hospital de Alta, los hospitalitos, las salas, las salitas. Chiche bombón. Más ahora que no aumentó todavía los sueldos (los va a aumentar más junto a las elecciones porque si no nos olvidamos enseguida, somos unos desagradecidos) pero da los créditos en el Provincia, 50.000 mangos a pagar 500 mangos por mes. Una ganga. No sé cuántas cuotas ni por cuánto tiempo. Pero ni importa, con la inflación, los 500 mangos siempre van a ser menos, y con los 50.000 se puede cambiar el autito, ir a Disney o a un viaje de Turismo de Castro, hacerse muchas estéticas, invertir en siliconas y botox, o sea, esas cosas que valen la pena y desarrollan.
Los demás hablan de envidia. Nunca menos. Nada más. El que tenga perro que lo ate, el que no, no.
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